En el aspecto clínico, la obesidad se evalúa típicamente midiendo el índice de masa corporal (IMC), la circunferencia de la cintura y evaluando la presencia de factores de riesgo y comórbidos. En los estudios epidemiológicos sólo se utiliza el IMC para definir la obesidad.
El índice de masa corporal (IMC) fue desarrollado por el estadístico y antropometrista belga Adolphe Quetelet. Se calcula dividiendo el peso del individuo en kilogramos entre la raíz cuadrada de su altura en metros. Se expresa en kg / m2.
Las definiciones actuales en uso establecen los siguientes valores, acordados en 1997 y publicados en 2000:
El IMC es un factor simple y ampliamente usado para estimar la grasa corporal. En epidemiología, el IMC se usa sólo como un indicador de prevalencia e incidencia.
El IMC como indicador de una enfermedad se usa en conjunción con otros indicadores clínicos tales como la circunferencia de la cintura. En un estudio clínico, los médicos tienen en cuenta la raza, la etnia, la masa muscular, la edad, el sexo y otros factores que pueden afectar a la interpretación del IMC. Así, el IMC sobreestima la grasa corporal en personas que tienen una gran masa muscular, mientras que puede subestimar la grasa corporal en los menos musculados (por ejemplo las personas mayores). La obesidad ligera, como es definida teniendo en cuenta sólo el IMC, no es un factor de riesgo cardíaco, y por tanto el IMC no puede usarse por sí sólo como un predictor de la enfermedad cardiovascular.
El IMC no tiene en cuenta las diferentes proporciones de tejido adiposo muscular, ni tampoco distingue entre diferentes formas de adiposidad, algunas de las cuales pueden correlacionarse más estrechamente con el riesgo cardiovascular. La mayor compresión de la biología de las diferentes formas de tejido adiposo ha mostrado que la grasa visceral u obesidad central tiene una correlación mucho más fuerte con la enfermedad cardiovascular que el IMC por sí sólo.
Para la medida de la obesidad central se usa la circunferencia de la cintura absoluta (mayor de 102 cm en hombres y de 88 cm en mujeres) o la relación cintura-cadera (más de 0.9 en hombres y más de 0.85 en mujeres).
Una forma alternativa de determinar la obesidad es la estimación del porcentaje de grasa corporal. Los doctores y científicos acuerdan en general que los hombres con más de un 25% de grasa corporal y las mujeres con más de un 30% son obesos. Sin embargo, es difícil medir la grasa corporal de una forma precisa. El método más aceptado es pesar a una persona bajo el agua, pero el peso subacuático es un procedimiento limitado a laboratorios con equipamiento especial. Dos métodos más simples para medir la grasa corporal son:
Otras medidas de la grasa corporal incluyen la tomografía computerizada, la resonancia magnética y la absorciometría de rayos X de energía dual.
En la práctica, para la mayoría de casos de sobrepeso que pueden producir riesgo, tanto doctor como paciente pueden ver "a ojo" si hay un exceso de grasa. En estos casos, el IMC proporciona objetivos simples que todos los pacientes pueden entender.
La presencia de factores de riesgo y enfermedades asociadas con la obesidad se usan también para establecer un diagnóstico clínico. La enfermedad coronaria del corazón, la diabetes tipo 2 y la apnea del sueño son posibles factores de riesgo que amenazan la vida, y deberían indicar la necesidad de un tratamiento médico para la obesidad. La diabetes y la enfermedad coronaria son también factores de riesgo usados en los estudios epidemiológicos.
Editor: GFDL, v.o., CC BY-SA 3.0 Muydelgada.com, 2015.
La obesidad: Historia, Cultura popular, Efectos sobre la salud, Formas de medirla, Causas, Tratamiento, Problema de salud pública.