Adelgazar

De forma natural, las grasas trans se encuentran en los productos lácteos y en la grasa corporal de los rumiantes (ganado vacuno y ovino) con un  porcentaje de entre el 2% y el 5% de la grasa total. Pero la mayor parte de las grasas trans son artificiales y proceden de los aceites vegetales parcialmente hidrogenados, aceites refinados (no virgen) y aceites de freír ("aceites de pescado"). Este tipo de aceites industriales es habitual en los alimentos procesados, sobre todo en la comida rápida, bollería (pasteles), snacks y productos fritos u horneados. Hay alimentos que pueden contener hasta un 60% de grasas trans. Entre los que más tienen están los pasteles (del 25% al 35%), la masa de pizza (del 15% al 60%),  las sopas deshidratadas (de un 4% a un 25%),  los cereales de desayuno (de un 2% a un 50%) y las margarinas no reformuladas (hasta un 15%).

La leche materna contiene grasas trans, con un porcentaje que varía desde el 1% al 7%, según el consumo habitual que haya tenido la madre de este tipo de grasas nocivas.